Magníficas colagem, Maurício. Cara, simplesmente não consigo pensar como vc consegue fazer esse link entre o que tá na mão e a tua ideia. É uma coisa louca. Deve ser a minha natureza de imaginar e fazer o que preciso que não me deixar entrar nessa área. Acho muito legal mesmo essa coisa de desenvolver a ideia com peças aqui e ali, garimpadas, mas que parecem que foram criadas pra aquele fim. Parabéns pelo trabalho.
Na verdade é um trabalho de interpretação e pesquisa de imagens. Na verdade tenho um hd externo com imagens recortadas, são milhares para falar a verdade.
De resto é prática e tentativa e erro!!
Obrigado por estar sempre, muito bom ter sua companhia nestes anos todos!
bellos bellos bellos....Mauri, de dónde sacás tanta belleza? voy a armar un comando para hacer una investigación y entrar por la noche, cuando dormís así vemos esa maravilla de tesoro que tenés, inagotable, conmovedora...beso
Para desentrañar (y robarle secretos) al gran collagista Mauricio me tomé una cucharada de tinta Pélikan con algún aditamento secreto para transformarme en un pelicaniforme y así poder volar gratis desde el Uruguay hasta el Brasil. Ya convertido en ave emprendí el viaje. Llegar no fue nada fácil porque las aves de aquel país hablan sólo portugués y no se les entiende mucho, pero preguntando, en una estación de servicio me dijeron de Mauricio. Luego usando una vieja y simple triquiñuela muté de ave a insecto transformándome en una mosca (es fácil ¿no vieron la película?). Así pude entrar en su estudio e instalarme en la esquina exacta del armario que da a las espaldas del famosísimo artista, para expiarlo desde ese lugar. Allí pude descubrirlo todo: el individuo, antes de ponerse a hacer collage alguno, se encomienda a unos dioses de plaistilina que él mismo ha hecho cuando niño y sintoniza una estación de radio en la que escucha a una pitonisa que tira las cartas y adivina la suerte por teléfono. Hace calor, y debo agarrarme con fuerza cuando el collagista enciende el ventilador de techo mientras marca el número de la pitonisa. Cuando ésta empieza a leerle el futuro el collagista anota en un cuadernito números y elementos estrafalarios que apenas puedo leer. Lo cierto es que al terminar su comunicación saca de un mueble apolillado y a punto de explortar por los cientos de carpetas con recortes que contiene, una con un número etrusco escrito en la tapa. Luego, de un cajón de su escritorio saca dos dados, uno verde y luminoso, casi transparente, y otro viejo, rojo, como de nácar. El collagista se concentra y cierra los ojos transpirando mientras sacude los dados que arroja sobre la mesa. Por un instante los mira fijo como temiendo algún destino esquivo y revuelve la carpeta buscando el sobre que lleva el número que acaban de revelar los dados. Vacía el contenido del sobre en la mesa y 665 recortes caen de su interior (creo que se le quedó uno trabado adentro). Entonces se venda los ojos y tira la montaña de recortes hacia arriba generando una verdadera lluvia de imágenes de la que con la mano izquierda tomará apenas una. Una. Inmediatamente sorbe un trago de una bebida aguardentosa color C50+Y100+K20 y vuelve a repetir todo el proceso. Semanas se pasa en este estado lamentable nuestro idolatrado collagista para apenas dar con las imágenes que va a usar. No puedo negar que me costó mucho quedarme en mi lugar. Pero bastó que derramara su inmunda aguardiente sobre algunos papeles para que no pudiese evitar ir a succionarla. El collagista me espantó dos o tres veces pero creo que estaba algo borracho para cuando comenzó a dirigir su orquesta de pegamentos y tijeras. A un gesto suyo las trinchetas quedaban suspendidas en el aire y los papeles volaban superponiéndose y doblándose unos sobre otros . Los pinceles a su vez se lavaban el cabello preparándose para la acción y yo, cada tanto y para aplacar el hambre de tantos días sorbía un trago de aquella deliciosa inmudicia que lo pegoteaba todo. Intenté volar pero ya casi no podía, borracho ahora yo también apenas si llegué hasta la frente del collagista que me espantó de revés. En el vuelo de regreso y ya al borde de la lámpara de dibujo logré ver parte de la magia, imágenes que comenzaban a metamorfosearse unas con otras, pinturas que hacían fondos que no eran sino el frente del tejado de una casa que era la pollera de una mujer lobo, y así. O el alcohool era muy fuerte. Yo estaba exitado porque lo que había venido a buscar estaba por suceder, cuando empezó a sonar “Indios”, de Legión Urbana y el collagista subió el volumen del equipo al máximo perdiendo el poco control emocional que le quedaba. A los saltos cortaba, pegaba y pintaba sin parar, mientras yo, para no perderme nada volaba posándome ahora en su nariz, ahora en su frente mientras él hacía su magia y tomaba con frenesí una trincheta, un recorte, una témpera, un matamoscas.
http://palavras-cruzadas.blogspot.com/2011/12/meme-as-10-coisas-que-mais-gosto.html Olá Maurício! Se quiseres fazer o meme, aí está o link.
Como vai tudo? Atarefado com a chegada do Natal? Por aqui eu já suspiro pelo Verão, está frio e isso me deixa pouco criativa!Vendi duas colagens sobre tela na Irelanda.O $$ segue para África, para ajudar as crianças. Foi tão fixe! Acho que vou fazer mais algumas!Sem ser isso não tenho cortado muito...mas ando cheia de vontade de recomeçar e de fazer algumas experiências. Vi as fotos no FB e fiquei cheia de inveja!:) Tens de criar workshops online! Abraços!
I really like your work. they're great!!! Please, visit me on my blog: http://jukawdoniczce.blogspot.com/ and write, what do you think about my collages.
12 comentários:
Magníficas colagem, Maurício.
Cara, simplesmente não consigo pensar como vc consegue fazer esse link entre o que tá na mão e a tua ideia.
É uma coisa louca.
Deve ser a minha natureza de imaginar e fazer o que preciso que não me deixar entrar nessa área.
Acho muito legal mesmo essa coisa de desenvolver a ideia com peças aqui e ali, garimpadas, mas que parecem que foram criadas pra aquele fim.
Parabéns pelo trabalho.
Obrigado Rivaldo,
Na verdade é um trabalho de interpretação e pesquisa de imagens. Na verdade tenho um hd externo com imagens recortadas, são milhares para falar a verdade.
De resto é prática e tentativa e erro!!
Obrigado por estar sempre, muito bom ter sua companhia nestes anos todos!
bellos bellos bellos....Mauri, de dónde sacás tanta belleza? voy a armar un comando para hacer una investigación y entrar por la noche, cuando dormís así vemos esa maravilla de tesoro que tenés, inagotable, conmovedora...beso
Creo que ilustrar viene de iluminar, y en tu caso es de lo más apropiado. Muy buenos tus trabajos, como siempre.
Un saludo
Parabéns... e feliz satisfeitos de acompanhar trabalhos tão criativos.
Pau Roberto Rocha
Maravilhoso. Só posso dizer isso. Parabéns!
Amigo, tu trabajo siempre será un ejemplo a seguir. Gran trabajo, me alegro que no falte. Apertas
Para desentrañar (y robarle secretos) al gran collagista Mauricio me tomé una cucharada de tinta Pélikan con algún aditamento secreto para transformarme en un pelicaniforme y así poder volar gratis desde el Uruguay hasta el Brasil. Ya convertido en ave emprendí el viaje.
Llegar no fue nada fácil porque las aves de aquel país hablan sólo portugués y no se les entiende mucho, pero preguntando, en una estación de servicio me dijeron de Mauricio.
Luego usando una vieja y simple triquiñuela muté de ave a insecto transformándome en una mosca (es fácil ¿no vieron la película?). Así pude entrar en su estudio e instalarme en la esquina exacta del armario que da a las espaldas del famosísimo artista, para expiarlo desde ese lugar.
Allí pude descubrirlo todo: el individuo, antes de ponerse a hacer collage alguno, se encomienda a unos dioses de plaistilina que él mismo ha hecho cuando niño y sintoniza una estación de radio en la que escucha a una pitonisa que tira las cartas y adivina la suerte por teléfono. Hace calor, y debo agarrarme con fuerza cuando el collagista enciende el ventilador de techo mientras marca el número de la pitonisa. Cuando ésta empieza a leerle el futuro el collagista anota en un cuadernito números y elementos estrafalarios que apenas puedo leer.
Lo cierto es que al terminar su comunicación saca de un mueble apolillado y a punto de explortar por los cientos de carpetas con recortes que contiene, una con un número etrusco escrito en la tapa. Luego, de un cajón de su escritorio saca dos dados, uno verde y luminoso, casi transparente, y otro viejo, rojo, como de nácar. El collagista se concentra y cierra los ojos transpirando mientras sacude los dados que arroja sobre la mesa. Por un instante los mira fijo como temiendo algún destino esquivo y revuelve la carpeta buscando el sobre que lleva el número que acaban de revelar los dados.
Vacía el contenido del sobre en la mesa y 665 recortes caen de su interior (creo que se le quedó uno trabado adentro). Entonces se venda los ojos y tira la montaña de recortes hacia arriba generando una verdadera lluvia de imágenes de la que con la mano izquierda tomará apenas una. Una. Inmediatamente sorbe un trago de una bebida aguardentosa color C50+Y100+K20 y vuelve a repetir todo el proceso. Semanas se pasa en este estado lamentable nuestro idolatrado collagista para apenas dar con las imágenes que va a usar. No puedo negar que me costó mucho quedarme en mi lugar. Pero bastó que derramara su inmunda aguardiente sobre algunos papeles para que no pudiese evitar ir a succionarla. El collagista me espantó dos o tres veces pero creo que estaba algo borracho para cuando comenzó a dirigir su orquesta de pegamentos y tijeras. A un gesto suyo las trinchetas quedaban suspendidas en el aire y los papeles volaban superponiéndose y doblándose unos sobre otros . Los pinceles a su vez se lavaban el cabello preparándose para la acción y yo, cada tanto y para aplacar el hambre de tantos días sorbía un trago de aquella deliciosa inmudicia que lo pegoteaba todo. Intenté volar pero ya casi no podía, borracho ahora yo también apenas si llegué hasta la frente del collagista que me espantó de revés. En el vuelo de regreso y ya al borde de la lámpara de dibujo logré ver parte de la magia, imágenes que comenzaban a metamorfosearse unas con otras, pinturas que hacían fondos que no eran sino el frente del tejado de una casa que era la pollera de una mujer lobo, y así. O el alcohool era muy fuerte. Yo estaba exitado porque lo que había venido a buscar estaba por suceder, cuando empezó a sonar “Indios”, de Legión Urbana y el collagista subió el volumen del equipo al máximo perdiendo el poco control emocional que le quedaba. A los saltos cortaba, pegaba y pintaba sin parar, mientras yo, para no perderme nada volaba posándome ahora en su nariz, ahora en su frente mientras él hacía su magia y tomaba con frenesí una trincheta, un recorte, una témpera, un matamoscas.
Sempre fastástico, Mauricio!
http://palavras-cruzadas.blogspot.com/2011/12/meme-as-10-coisas-que-mais-gosto.html
Olá Maurício! Se quiseres fazer o meme, aí está o link.
Como vai tudo? Atarefado com a chegada do Natal? Por aqui eu já suspiro pelo Verão, está frio e isso me deixa pouco criativa!Vendi duas colagens sobre tela na Irelanda.O $$ segue para África, para ajudar as crianças. Foi tão fixe! Acho que vou fazer mais algumas!Sem ser isso não tenho cortado muito...mas ando cheia de vontade de recomeçar e de fazer algumas experiências. Vi as fotos no FB e fiquei cheia de inveja!:) Tens de criar workshops online!
Abraços!
I really like your work. they're great!!! Please, visit me on my blog: http://jukawdoniczce.blogspot.com/ and write, what do you think about my collages.
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